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“‘La Realidad’ con María Martínez: Norma Lezana analiza el paro y la crisis del Garrahan”

¡Qué lio se armó en el Garrahan! La licenciada Norma Lezana, presidenta de la Asociación de Profesionales y Técnicos (APyT), no se guardó nada y lo soltó todo en “La Realidad”, el programa de la periodista María Martínez en Diucko Digital, y los trabajadores del hospital se plantan en un paro total, Lezana se encargó de pintar un cuadro bastante oscuro de la situación en el que alguna que otra verdad incómoda quedó en evidencia.

Lezana no dudó en contar la cruda realidad del hospital pediátrico más importante de Argentina. Según ella, el Garrahan está en una situación “desesperante,” con sueldos que ya no alcanzan ni para pagar el alquiler. “Desde octubre del año pasado,la mitad de los sueldos están congelados. Encima, los administrativos están cobrando entre 400 y 500 mil pesos, y con eso no les alcanza ni para alquilar un monoambiente,” disparó sin pelos en la lengua. No es para menos, los precios están por las nubes y el dinero parece evaporarse.

El paro de 24 horas que realizan los trabajadores es un grito desesperado por un aumento salarial del 100% y en rechazo al maldito Impuesto a las Ganancias, que sigue sacándole el jugo a los salarios. Además, el gremio no quiere saber nada con que la paritaria del Garrahan se acople a la de los estatales, que apenas rascan un 2% de aumento en septiembre y un triste 1% en octubre. “¡Eso es una miseria comparado con lo que necesitamos!” afirmó Lezana.

El colmo de los colmos, según la licenciada, es que desde los ministerios de Salud de Nación y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, no hay ni señales de diálogo. “Nos están dejando tirados, sin siquiera considerar lo que significa trabajar en el Garrahan, con pacientes que son un desafío diario,” explicó Lezana.

No hay duda de que la lucha recién empieza, y que los trabajadores del Garrahan no piensan bajar los brazos. La situación es grave, pero como dicen por ahí, “cuando el barco se hunde, los que saben nadar no se quedan quietos.” Así que, mientras ellos sigan remando, la pelea por un salario digno y una salud pública de calidad continúa.

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